¿Afecta el tamaño de la mano a lanzar una pelota?

Mucha gente piensa que ser alto y tener manos grandes son ingredientes esenciales para ser un jugador de baloncesto exitoso. La fuerza de la mano, sin embargo, es un factor mucho más importante para poder driblear y disparar que el tamaño de la mano. Dado que la mayor parte del manejo y lanzamiento de la pelota se realiza controlando la pelota con la punta de los dedos, el tamaño total de su mano rara vez entra en juego en la cancha de baloncesto.

Tu formulario de tiro

Si está utilizando la forma de tiro correcta, su mano de tiro se extenderá por debajo de la pelota de baloncesto. Solo las yemas de la mano y de los dedos deben tocar la pelota para que sea más fácil lanzar el tiro hacia arriba y hacia la canasta. La pelota nunca debe descansar en la palma de su mano, ya que esto hace que sea más difícil lanzar rápidamente su golpe. Si sus manos más grandes conducen a una forma incorrecta, con la pelota descansando en su palma, en realidad puede ser una desventaja cuando se trata de disparar.

Tu liberación

La fuerza de la muñeca, la mano y la punta de los dedos juega un papel importante en el lanzamiento de su tiro en suspensión. Cuando un tirador salta, la pelota se lanza hacia la canasta haciendo un chasquido o moviendo la muñeca hacia la canasta para crear un efecto retroceso. Este efecto de retroceso suaviza el tiro, dándole una mejor oportunidad de ir si golpea el aro. Cuanto más fuerte sea el chasquido de la muñeca, más efecto retrocederá y más aire podrá recibir bajo el tiro.

Seguir adelante

Dado que su disparo tiene menos que ver con el tamaño de la mano y más con la fuerza y ​​la forma adecuada, el seguimiento de su disparo a menudo puede determinar su precisión. Una de las principales causas de disparos inexactos es una falla en la técnica, conocida como tirar de la cuerda. Esto sucede no por el tamaño de su mano, sino por tirar de la mano hacia abajo en lugar de seguir adelante.

Fuerza, no tamaño

El control y la precisión de su disparo dependen únicamente de la fuerza de sus muñecas y yemas de los dedos. Puede resultar sorprendente que incluso "palmear" una pelota de baloncesto, o sostenerla con una mano, también dependa más de la fuerza de la mano que del tamaño de la mano. Esto hace que los entrenamientos, como las flexiones con la punta de los dedos, sean de vital importancia para su éxito como manejador de pelota y tirador.