¿Caminar en una cinta de correr puede hacer que le duela la espalda?

Caminar en una cinta para correr es una manera maravillosa de mantener o mejorar su condición aeróbica sin tener que lidiar con las inclemencias del tiempo. También ofrece la oportunidad de leer o ver programas de televisión mientras camina, ya que no tiene que preocuparse por toparse con objetos. Sin embargo, caminar por una pendiente en la cinta de correr puede generar tensiones inusuales en la espalda.

Caminar en una pendiente

Las posibilidades de desarrollar una espalda baja adolorida o fatigada aumentan al subir una pendiente, ya sea sobre el suelo o en la cinta de correr. El desafío de las colinas provoca un desplazamiento de la carga de caminar hacia los músculos de la parte delantera de los muslos, los cuádriceps. También es necesaria una inclinación del tronco hacia adelante para mantener su centro de masa sobre su base de apoyo.

Una columna vertebral alineada

Cuando la columna está en su alineación natural, toma una forma similar a la letra “S”, con una curva en la región lumbar inferior y otra en la parte superior de la espalda, la región torácica. Los discos entre las vértebras llevan el peso de la parte superior del cuerpo uniformemente a través de sus superficies cuando estas vértebras están alineadas. Cuando se altera esta curva natural, los discos se comprimen de manera desigual. Subir una pendiente puede acentuar la curva de la espalda baja, lo que resulta en una compresión asimétrica excesiva o prolongada de estos discos, lo que puede provocar dolor o lesiones.

La pelvis controla la curvatura

Al subir un grado, se recurre a los cuádriceps en un grado mucho mayor que cuando se camina sobre un terreno nivelado. Los músculos erectores de la columna que corren a lo largo de la columna se activan más, sosteniendo el tronco, que debe inclinarse hacia adelante para mantener el equilibrio. Ambos grupos de músculos tiran de la pelvis, girándola hacia atrás, provocando un arco lumbar excesivo.

Músculos cuesta arriba

Cuando la pendiente se inclina hacia arriba, la carga sobre los músculos cambia. Los músculos abdominales e isquiotibiales que inclinan la pelvis hacia adelante y aplanan el arco lumbar son mucho menos activos y luego producen poca oposición a los cuádriceps y los músculos de la espalda. Esta curvatura crea fuerzas de pellizco en los discos intervertebrales que pueden provocar dolor. Cuanto más empinada sea la pendiente, mayores serán estas fuerzas y mayores serán las posibilidades de desarrollar dolor de espalda y dolor al caminar cuesta arriba.

Aliviar el dolor

Si siente dolor de espalda al caminar en una cinta de correr, puede encontrar alivio al reducir la inclinación o al pararse más erguido agarrándose de los pasamanos mientras continúa caminando. Si el malestar no se alivia con estas dos medidas, es posible que deba volver a caminar sobre un terreno nivelado, lo que debería eliminar el dolor.