Cómo corregir la forma de sprint

Una actividad de alta intensidad, el sprint implica correr tan rápido como puedas por una distancia corta, como 100 metros. Los beneficios de las carreras de velocidad incluyen mejorar el acondicionamiento general y al mismo tiempo desarrollar una masa muscular magra significativa en las piernas, los glúteos y el tronco. Se requiere mucha potencia y fuerza para ser un velocista eficaz; cuando se ejecuta incorrectamente, pueden producirse desequilibrios musculares y lesiones. Tómate el tiempo para analizar objetivamente cómo se mueve tu cuerpo mientras corres para mejorar tu forma.

1

Concéntrese en su técnica y forma. Estire la columna, levante ligeramente el pecho y empuje los omóplatos hacia abajo y lejos de las orejas. Inclina tu torso ligeramente hacia adelante mientras mantienes la espalda recta. Involucre sus músculos abdominales y glúteos para mantener los pies ligeros, lo que puede ayudarlo a evitar cualquier tensión innecesaria en sus articulaciones.

2

Aterriza sobre la punta de tu pie. Colócalo directamente debajo de tu centro de gravedad. Esprintar con los pies planos, que es cuando los talones tocan el suelo primero, puede ralentizar enormemente sus movimientos y, al mismo tiempo, aumentar drásticamente el riesgo de lesiones.

3

Realice longitudes de zancada que se sientan cómodas, asegurándose de no extender demasiado el paso o cortar la zancada demasiado corta. Mueva la pierna que camina hacia arriba y hacia adelante con una fuerza considerable; cuanto mayor sea la fuerza, más rápido será el sprint. Realice un movimiento circular hacia las nalgas con el talón a medida que el pie se levanta del suelo, luego continúe el movimiento hacia el suelo.

4

Relaje los brazos durante todo el sprint; cualquier exceso de tensión en el cuerpo puede interferir con su velocidad. Doble los brazos en un ángulo de 90 grados y manténgalos cerca de los costados. Mueva los brazos hacia arriba y hacia abajo con un movimiento similar al de un martillo al ritmo que coordina con los pasos. Evite balancear los brazos frente a su cuerpo mientras corre.

5

Alinee su cuello con su columna manteniendo su cabeza neutral y relajada; mire hacia adelante y evite inclinar la barbilla hacia arriba o hacia abajo durante el sprint. Relaje su mandíbula, un lugar común para mantener la tensión. La tensión de la mandíbula puede viajar a su cuello y bajar por su columna, interfiriendo con los movimientos productivos de su cuerpo.