Cómo no voltearse el tobillo mientras patina

Independientemente de si se realiza sobre hielo o pavimento, el patinaje puede traer alegría a personas de todas las edades. Sin embargo, al igual que con otras actividades deportivas, el patinaje presenta ciertos riesgos, como un tobillo torcido. Para evitar un tobillo enrollado, asegúrese de proporcionar una cantidad adecuada de soporte para el tobillo. Evitar las superficies de patinaje irregulares, trabajar en equilibrio y fortalecer el tobillo también puede ser de gran ayuda a la hora de prevenir este tipo de lesión dolorosa.

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Proporcione un soporte adecuado para los tobillos. Las botas deben estar ajustadas alrededor del tobillo y en buenas condiciones. Asegúrese de atar los patines con fuerza, comenzando por los dedos de los pies y avanzando hacia el tobillo, para promover una mayor estabilidad del tobillo. Para soporte adicional del tobillo, considere el uso de tobilleras o vendas de cinta atlética, especialmente si los tobillos doblados han sido un problema en el pasado.

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Evite las superficies de patinaje irregulares. Patinar sobre hielo o pavimento rugoso puede desequilibrarlo y puede resultar en el desarrollo de un tobillo torcido. Compruebe con anticipación la superficie sobre la que va a patinar para identificar golpes, caídas u otras fuentes de inestabilidad. Si es posible, traslade los eventos de patinaje a un área diferente hasta que se puedan reparar estas irregularidades.

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Trabaja en equilibrio. El equilibrio es crucial para patinar y, en la mayoría de los casos, cuanto mejor sea su equilibrio, menos susceptible será a las caídas y los tobillos doblados. Para mejorar el equilibrio, intente una pose de equilibrio. Párese sobre un pie con la otra pierna doblada por la rodilla y extendida detrás de su cuerpo. Mantenga la postura hasta por 30 segundos y repita con la otra pierna. Para hacer que la actividad sea aún más desafiante, intente pararse sobre una superficie irregular, como una almohada o un piso con una alfombra gruesa.

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Desarrolle la fuerza del tobillo. Al igual que con el equilibrio, el aumento de la fuerza del tobillo puede ser de gran ayuda cuando se trata de evitar los tobillos doblados. Si bien hay varios tipos diferentes de ejercicios que pueden ser efectivos cuando se trata de desarrollar la fuerza del tobillo, la Sociedad Estadounidense de Tobillo y Pie Ortopédico informa que los ejercicios isométricos, en los que las personas presionan el tobillo contra un objeto fijo, ofrecen una gran ventaja. lugar de partida. Para obtener mejores resultados, presione la parte interior de su pie contra un objeto sólido, como un sofá, y manténgalo presionado durante 10 segundos. Repita, esta vez usando la parte exterior de su pie para presionar contra el mismo objeto y manténgalo así durante 10 segundos.