Correr y desequilibrio muscular

Correr es uno de los entrenamientos cardiovasculares más efectivos que puedes hacer para un estado físico total y quemar calorías, pero también impone una gran demanda a tu cuerpo. Las millas largas y el movimiento repetitivo pueden provocar desequilibrios musculares que causan lesiones como tendinitis, síndrome de la banda iliotibial, dolor de rodilla y distensiones o tirones musculares. Al comprender su cuerpo como corredor, puede aprender a corregir estos desequilibrios y mantenerse saludable y encaminado con su entrenamiento.

La causa

La mayor parte de tu acción como corredor tiene lugar en el centro y la parte inferior del cuerpo. Cuanto más corres, más utilizas algunos músculos específicos involucrados en las acciones dominantes. Los músculos pueden volverse tan poderosos que su fuerza supera proporcionalmente a los músculos menos activos que los rodean, incluidos los músculos que trabajan con ellos para realizar el movimiento de carrera. Esto crea lo que se llama un desequilibrio muscular.

El problema

Cuando sus músculos se desequilibran, los músculos más fuertes compensan en exceso a los más débiles. Debido a que los músculos débiles no pueden igualar la fuerza y ​​la resistencia de los más fuertes, se fatigan más fácilmente y obligan a los músculos más fuertes a trabajar más. Con el tiempo, los músculos comienzan a romperse bajo la tensión y desarrollan lesiones por uso excesivo, que Core Performance define como "uso repetitivo de articulaciones que se vuelven disfuncionales debido a los desequilibrios musculares".

Las lesiones

Según el presidente y fundador de Core Performance, Mark Verstegen, aproximadamente el 65 por ciento de las lesiones deportivas y de estilo de vida provienen del uso excesivo. Las caderas, glúteos, isquiotibiales o cuádriceps débiles son responsables del síndrome de la banda iliotibial y una serie de problemas de rodilla. Los músculos sobreutilizados, especialmente los isquiotibiales, también son susceptibles a la inflamación, las distensiones y los tirones.

El remedio

Para evitar lesiones al correr causadas por desequilibrios musculares, realice ejercicios específicos para fortalecer los músculos más débiles. Para caderas y glúteos subdesarrollados, haga puentes de glúteos, sentadillas con una sola pierna, cortadores de madera de pie y levantamientos de piernas acostados, que trabajan los músculos estabilizadores más profundos. Si tiene isquiotibiales débiles, pruebe con flexiones de isquiotibiales, que no causarán tensión innecesaria al músculo. Use planchas para sus abdominales para involucrar todo su núcleo y haga superman para aislar su espalda baja. Realice estos ejercicios dos o tres veces por semana y consulte con su médico antes de comenzar, especialmente si las lesiones son graves.