Tanto nadar como correr mejoran la resistencia cardiovascular, que es la capacidad del corazón para enviar oxígeno a través de la sangre a los principales grupos musculares de su cuerpo y la capacidad de sus músculos para usar ese oxígeno. La capacidad pulmonar, o la cantidad de oxígeno que sus pulmones pueden tomar y contener en una respiración, es una parte importante de la resistencia cardiovascular. No hay pruebas de que nadar o correr mejore significativamente la capacidad pulmonar más que el otro, ya que ambos son actividades físicas muy beneficiosas.
Just Breathe: Resistencia cardiovascular y capacidad pulmonar
Cuanto mejor sea su resistencia cardiovascular, más eficiente será su cuerpo en el uso de oxígeno, mejorando así su resistencia para las actividades físicas. El oxígeno ingresa a la sangre a través de los pulmones. Su corazón bombea esa sangre a sus músculos y órganos, donde es utilizada por sus células y tejidos como parte de un proceso complicado para producir energía para que su cuerpo la utilice durante las actividades diarias, así como durante los momentos de actividad física más intensa. Aunque sus pulmones no pueden expandirse en tamaño, el ejercicio cardiovascular, incluidos correr y nadar, ayuda a su cuerpo a hacer que el proceso de respirar y retener oxígeno en los pulmones sea más eficiente.
Sal a la carretera: corriendo
Correr es una forma común de ejercicio cardiovascular debido a las pocas barreras de entrada para participar en la actividad. Con zapatos adecuados para correr, uno puede correr casi en cualquier lugar. Al correr, su cuerpo mejora su resistencia cardiovascular y desarrolla músculos, particularmente en la parte inferior del cuerpo, incluidas las caderas, los muslos, las pantorrillas y los pies. A medida que sus pulmones mejoran su capacidad para retener oxígeno, su corazón enviará de manera eficiente sangre rica en oxígeno a sus músculos, especialmente a los que trabajan en la parte inferior del cuerpo. La natación involucra los músculos de la parte superior e inferior del cuerpo, por lo que su corazón debe enviar sangre rica en oxígeno a los músculos de ambas extremidades.
Como un pez: nadando
Nadar largos o nadar por diversión durante un período prolongado de tiempo mejorará la capacidad pulmonar y la resistencia cardiovascular. Cualquier ejercicio cardiovascular debe realizarse al menos tres veces a la semana durante 20 minutos o más, según el Consejo del Presidente de Fitness, Deportes y Nutrición. A medida que su sistema cardiovascular comience a adaptarse a su régimen, sus pulmones aumentarán la capacidad de tomar oxígeno con cada respiración, enviando así más oxígeno a su sangre. Su corazón también latirá de manera más eficiente, enviando así más sangre rica en oxígeno a sus músculos con cada latido.
Ejercicio cardiovascular
Cualquier forma de ejercicio cardiovascular, incluida la natación y la carrera, es un componente fundamental de un estilo de vida saludable. El ejercicio cardiovascular expande la capacidad pulmonar y mejora la eficiencia cardíaca al aumentar la frecuencia cardíaca. Otras formas de ejercicio cardiovascular incluyen saltar la cuerda y andar en bicicleta.