Presión arterial alta y alcohol

La presión arterial alta, o hipertensión, afecta a casi 78 millones de adultos en los EE. UU., Informa la American Heart Association. El consumo excesivo de alcohol es un factor de riesgo comúnmente subestimado. Si bien beber alcohol con moderación se ha asociado con un menor riesgo de enfermedad coronaria, el consumo excesivo de alcohol está relacionado con la presión arterial alta y el accidente cerebrovascular. Las personas que decidan beber deben hacerlo con moderación: no más de 2 bebidas al día para los hombres y no más de 1 bebida al día para las mujeres.

Vínculo entre alcohol y presión arterial

El vínculo entre la presión arterial alta y la ingesta excesiva de alcohol se ha reconocido durante años. Un artículo de revisión de 2012 en "The Journal of Clinical Hypertension" examinó 16 estudios publicados entre 1990 y 2012 sobre la relación entre el alcohol y la hipertensión. Los investigadores encontraron que la mayoría de los estudios revelaron un mayor riesgo de hipertensión arterial entre los bebedores más frecuentes, los que bebían más de aproximadamente 3 bebidas al día. Al comparar varios estudios, puede resultar difícil distinguir los efectos del alcohol de la influencia de otros factores, como el tabaquismo y los hábitos alimentarios. No obstante, varios estudios individuales también han identificado el consumo excesivo de alcohol como un factor de riesgo independiente de hipertensión arterial.

Consumo excesivo de alcohol

Las personas a veces creen que si evitan el alcohol durante la semana y solo beben mucho durante el fin de semana, su riesgo de riesgos para la salud relacionados con el alcohol es menor. El consumo excesivo de alcohol, definido por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades como 5 o más bebidas en una sesión para los hombres y 4 o más bebidas para las mujeres, todavía está relacionado con la presión arterial alta y el accidente cerebrovascular, incluso si no ocurre a diario. El consumo excesivo de alcohol no solo fomenta el tabaquismo y otros hábitos que contribuyen a la hipertensión, sino que la exposición al alcohol en sí misma provoca un aumento en la presión arterial.

Síndrome de abstinencia de alcohol

Los bebedores empedernidos corren el riesgo de tener síndrome de abstinencia de alcohol, una afección que se presenta dentro de varias horas y hasta 3 días después de la hora de su último trago. Temblor, dificultad para dormir y ansiedad leve son síntomas iniciales comunes. Algunas personas, sin embargo, son propensas a síntomas más graves, como frecuencia cardíaca rápida, presión arterial alta, agitación e incluso convulsiones. Algunos investigadores especulan que los episodios sutiles de abstinencia de alcohol pueden ser una de las razones por las que los bebedores empedernidos corren el riesgo de tener presión arterial alta.

Previniendo Complicaciones

La presión arterial alta es un trastorno común pero muy tratable. Si tiene presión arterial alta que ha sido difícil de controlar a pesar de no fumar, hacer ejercicio con regularidad, llevar una dieta balanceada y tomar los medicamentos según las indicaciones, considere reducir su consumo de alcohol. Tenga en cuenta que el consumo de alcohol también puede interferir con los medicamentos para la presión arterial alta, lo que los hace menos efectivos y la presión arterial más difícil de controlar.